El calentamiento de los océanos alcanza niveles récords, advierte la OMM
“Las consecuencias de estos
cambios se sentirán durante cientos de años a causa de la gran inercia del
océano”, informó Petteri Taalas, a propósito del Día Meteorológico Mundial.
Por Roberto Andrés para
Sustentartv
El océano es el termostato de
la Tierra. Sin embargo, el equilibrio natural entre océano y atmósfera está
cada vez más alterado por los efectos de las actividades humanas. Según Petteri
Taalas, secretario general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), “el
contenido calorífico de los océanos ha alcanzado niveles sin precedentes a
causa de las emisiones de gases de efecto invernadero, y la acidificación de
los océanos no cesa”.
El físico, que dirige el
organismo internacional desde 2016, alertó sobre la situación de los océanos a
propósito del Día Meteorológico Mundial, celebrado este 23 de marzo. “Las
consecuencias de estos cambios se sentirán durante cientos de años a causa de
la gran inercia del océano”, dijo.
PROTECTORES CONTRA EL CALENTAMIENTO GLOBAL
Los océanos absorben más del
90 % del exceso de calor atrapado en el sistema climático por los gases de
efecto invernadero. Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el
Cambio Climático (IPCC), para 2100 el océano habrá absorbido entre dos y cuatro
veces más calor que en los últimos 50 años si el calentamiento global se limita
a los 2 °C, y entre cuatro y siete veces más si supera esta barrera.
La absorción del calor solar
por parte de los océanos nos protege de un mayor aumento de la temperatura. Sin
embargo, el precio que pagamos por esa protección es muy elevado, porque el
calentamiento de los océanos y los cambios en su química ya están trastocando
los ecosistemas marinos y la vida de quienes dependemos de ellos.
“El hielo se está derritiendo,
y ello entraña profundas repercusiones para el resto del planeta que se
manifiestan a través de cambios en las pautas meteorológicas y la aceleración
de la subida del nivel del mar”, indica Taalas.
En 2020 la extensión mínima
anual de hielo marino en el Ártico fue una de las más bajas de las que se tiene
constancia. Según el secretario general, “esto expuso a las comunidades polares
a episodios atípicos de inundaciones costeras, y a múltiples partes
interesadas, como los sectores naviero y pesquero, a peligros causados por los
hielos marinos”.
A su vez, en el Atlántico las
cálidas temperaturas oceánicas contribuyeron a alimentar una temporada de
huracanes sin precedentes, y a la formación de intensos ciclones tropicales en
el océano Índico y en el sur del Pacífico.
SISTEMAS DE ALERTA TEMPRANA
“Cerca del 40 % de la
población mundial vive a menos de 100 km de la costa, y por ello es imperioso
proteger a las comunidades de los peligros costeros mediante la mejora de los
sistemas de alerta temprana multirriesgos y las predicciones que tienen en
cuenta los impactos”, informa Taalas.
Los indicadores e impactos
climáticos relacionados con los océanos figuran en la Declaración de la OMM
sobre el estado del clima mundial 2020, que se publicará antes de la
celebración del Día de la Tierra el 22 de abril.
Con la elección del tema del
Día Meteorológico Mundial 2021 dedicado a los océanos se quiere poner de
relieve el inicio del Decenio de las Naciones Unidas de las Ciencias Oceánicas
para el Desarrollo Sostenible (2021-2030), iniciativa impulsada por la Comisión
Oceanográfica Intergubernamental (UNESCO-COI).
“La OMM está decidida a
contribuir a la consecución de los objetivos del Decenio centrados en lograr un
‘océano seguro’, un ‘océano predecible’ y un ‘océano transparente’”, anuncian
desde el organismo.
Cada 23 de marzo se celebra el
Día Meteorológico Mundial para conmemorar la fecha de 1950 en la que entró en
vigor el Convenio por el que se estableció la OMM. Esta jornada tiene por
objeto promover el trabajo ininterrumpido de los Servicios Meteorológicos e
Hidrológicos Nacionales para proteger vidas y bienes, no solo en tierra, sino
también en el mar.
“Los avances tecnológicos están revolucionando nuestra capacidad para monitorear sistemáticamente el océano y, por tanto, cambian radicalmente nuestra comprensión de sus repercusiones en el tiempo y el clima”, informan.