Reclaman expandir las ciclovías en Ciudad de Buenos Aires a 500 km y mejorar el mantenimiento
Con la pandemia se multiplicó el uso de la bicicleta. Sin embargo, los 250 km actuales ya no bastan. Según Greenpeace, “es necesario mejorar el estado de las ciclovías y hacer que la red alcance a todos los barrios de la Ciudad”.
Por Roberto Andrés para Sustentartv
Finalizó la semana de la movilidad sostenible y Greenpeace aprovechó la ocasión para reclamar al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires la habilitación de 500 km de ciclovías para 2023, además de señalar la falta de mantenimiento en muchos de los carriles exclusivos existentes.
“La explosión del uso de la
bicicleta como medio de transporte y para recreación en las ciudades, y en
Buenos Aires en particular, es una realidad que debemos aprovechar”, declaró
Bruno Giambelluca, integrante del equipo de Campañas de Greenpeace. “Es
necesario mejorar el estado en que se encuentran las ciclovías y hacer que la
red alcance a todos los barrios de la Ciudad”.
Actualmente Buenos Aires
cuenta con 250 km de carriles exclusivos, según datos oficiales. Muchos de
ellos de doble circulación y en estado precario de mantenimiento, con
desniveles y baches, además de la falta de control del estacionamiento de
automóviles sobre su traza.
La cantidad de viajes en
bicicleta en la ciudad se multiplicó desde el comienzo de la pandemia en un 114
%. El fenómeno se registra en distintos
niveles en todo el mundo y refuerza la tendencia de los últimos años.
El congestionamiento de
pasajeros en el transporte público hizo que el uso de la bicicleta se empiece a
imponer como medio de transporte, ya que asegura la distancia social y reduce
el riesgo de contagio.
“Si Buenos Aires aspira a
convertirse en una ciudad inteligente en la cual las personas sean el centro y
no los automóviles, debe adoptar un programa agresivo de expansión de ciclovías
seguras. 500 kilómetros para 2023 y 300 km de ciclovías transitorias para fines
de este año, es una cifra razonable para una Ciudad como la nuestra”, dijo
Giambelluca.
El reclamo de Greenpeace
incluye la reducción de la velocidad de los automóviles a 30 y 50 km por horas
en calles y avenidas con ciclovías, respectivamente, además del control y
penalización del estacionamiento y la extensión a todos los barrios,
especialmente en el Sur/Suroeste de la ciudad, donde hoy la conectividad es
menor que en otros puntos de la Ciudad.
Hay muy buenas razones que
hacen de la bicicleta una actividad beneficiosa, tanto en lo que hace a la
salud, el ambiente como así también al bolsillo.
Respecto a la salud personal,
el uso de la bicicleta nos fortalece física y mentalmente. Por una parte, reduce
el estrés, pues se trata de un deporte que no requiere una alta concentración
ni pensar en los siguientes pasos. El tiempo es para vos, para pensar, para
escuchar música o sencillamente para desconectarte, lo que te permite liberar
tensiones y despejar nuestra mente de las preocupaciones del día a día.
Por otra parte, el pedaleo
quema calorías, siendo beneficioso para el corazón. Se pueden quemar hasta 500
calorías con solo una hora a un ritmo no muy exigente. Permite quemar grasas y combatir
el colesterol, una de las primeras causas de enfermedad cardiovascular. También
tonifica los cuádriceps o los isquiotibiales, incluso si es para ir al trabajo,
de compras o para pasear.
Bicicletear aumenta nuestro
sistema inmunológico. Por la postura, levemente inclinada hacia delante, el uso
de la bici fortalece los músculos de la zona lumbar de la columna disminuyendo
la posibilidad de tener hernias. También previene lesiones en las rodillas
fortaleciéndolas, ya que al tratarse de un deporte de bajo impacto las rodillas
no se ven tan castigadas como en otros deportes.
Además, con la bicicleta la
actividad cardiovascular aumenta la segregación de endorfinas, la hormona de la
felicidad, lo que hará que tengas una agradable sensación de satisfacción tras
el ejercicio. Si mejoramos nuestra forma física mejora nuestra apariencia,
nuestro ánimo y también estamos más dispuestos a conocer nueva gente y
compartir experiencias con otros ciclistas. Incluso, al estar en forma y con
mejor ánimo, andar en bicicleta también beneficia nuestra vida sexual.
Con la bicicleta también ahorramos, ya que no gastamos combustible. Incluso, en algunos países, como en Francia, hasta te pagan por ir al trabajo en bicicleta. Y finalmente, ayudamos a la preservación del medioambiente, con menos emisiones contaminantes y menos ruido, y todos los beneficios que esto conlleva.