La ONU donó 82 millones de dólares a la Argentina para que proteja sus bosques
El pasado martes 14 en un acto oficial el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) firmaron un acuerdo por 82 millones de dólares para que Argentina proteja sus bosques nativos. El monto del proyecto fue aprobado por el Fondo Verde para el Clima y se trata de la donación más grande latinoamericana de este tipo. Serán 4.5 millones las hectáreas de bosques nativos que pasarán a manejo sostenible, lo que representa un 8.5 % del área total de bosques del país.
El convenio del Proyecto de
Pagos Basados en Resultados de REDD+ (reducción de emisiones por deforestación
y degradación de bosques) buscará contribuir con la implementación del Plan de
Acción Nacional de Bosques y Cambio Climático y el cumplimiento de la
Contribución Determinada a Nivel Nacional con énfasis en los lineamientos de la
Ley 26331 de bosques nativos.
El acto de firma del acuerdo
estuvo a cargo de los ministros de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la
Nación, Juan Cabandié, y de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y
Culto, Felipe Solá, junto al representante regional para América Latina y el
Caribe de la FAO, Julio Berdegué.
FINANCIAMIENTO OTORGADO POR LA REDUCCIÓN DE 18 MILLONES DE TONELADAS DE CO2
“Nadie va a escapar del
impacto del cambio climático. Ya no estamos hablando del futuro, sino de hoy. Y
una de las formas que podemos enfrentarlo es conservando la riqueza y la salud
de los bosques”, señaló Berdegué.
“Argentina está recibiendo fondos por haber alcanzado resultados, y es una gran señal que dedique esos fondos a impulsar el manejo sostenible de los bosques, en un momento en el cual la crisis de COVID-19 requiere una recuperación económica y social desde la óptica de la transformación climática”, agregó.
El financiamiento fue otorgado
como pago por los resultados de la reducción de 18 millones de toneladas de CO2
equivalentes. Esta reducción es parte de un total de 165 millones de toneladas
que la Argentina logró disminuir en el período 2014-2016, a partir de la
deforestación evitada en las regiones del Parque Chaqueño, en la Selva Tucumano
Boliviana, en el Espinal y en la Selva Misionera.
“Estos fondos los vamos a
utilizar en un plazo de seis años con mucha responsabilidad, porque para
nosotros la agenda de cambio climático y preservar los servicios ecosistémicos
que nos brindan los recursos naturales es una prioridad”, señaló Juan Cabandié
tras la firma del convenio.
“Este financiamiento será destinado a preservar nuestras cuencas forestales, para extender el área de bosques bajo manejo sostenible, trabajar en la ganadería integrada con bosque nativo y generar mecanismos de integración social para las comunidades que viven alrededor de las cuencas”, agregó.
Por su parte, Felipe Solá
afirmó: “Estamos demostrando que el desarrollo sostenible precisa de políticas
coherentes a todos los niveles, del compromiso de todos los actores y de la
adecuada movilización de recursos financieros. Solo desde esa coherencia y esa
participación vamos a poder abordar las causas estructurales del calentamiento
global y plantear las mejores soluciones para combatirlo. Desde la Cancillería
nos comprometemos a seguir trabajando junto con el resto de los ministerios y
la FAO para fortalecer las acciones de REDD+, con miras a la próxima COP26”.
El proyecto será ejecutado en
forma conjunta por la cartera, las provincias y la FAO, en un plazo de seis
años, junto con socios clave del Gobierno, la sociedad civil, instituciones del
sector técnico-académico y Naciones Unidas.
OBJETIVOS DEL PROYECTO
Entre los principales objetivos del proyecto se pueden mencionar el trabajo con comunidades locales, mujeres rurales y pueblos originarios que viven y dependen de los bosques, con quienes se impulsará el establecimiento de 7 cuencas forestales sostenibles, apoyando a 7 mil familias de productores.
El proyecto busca establecer 95 planes integrales de manejo comunitario y 92 planes de manejo de bosques con ganadería integrada que beneficiarán en forma directa a 2.900 familias de comunidades locales e indígenas.
También implementará 6 planes
estratégicos de prevención de incendios a nivel provincial y contribuirá a la
autonomía económica de las comunidades que viven en el bosque, garantizando su
acceso equitativo a los recursos y la posibilidad de decidir sobre su uso.
Además, contribuirá a la recuperación económica postpandemia a través del fortalecimiento de las economías regionales asociadas a los bosques nativos, mejorando el acceso a los mercados, la generación de empleo y los medios de vida de las comunidades en las áreas rurales.