Las ballenas ayudan a combatir el cambio climático e impulsan la economía azul
Las ballenas tienen la capacidad de capturar CO2 -uno de los
gases responsables del efecto invernadero- y de reponer nutrientes al mar, por
lo que su rol es clave frente al cambio climático, señalan especialistas.
Roxana Schteinbarg, co-fundadora y coordinadora de Programas de Comunicación del Instituto de Conservación de Ballenas (ICB), explicó que “con sus enormes cuerpos, tienen la capacidad de capturar CO2 (dióxido de carbono) de origen antropogénico, mucho más que un árbol: 33 toneladas a lo largo de su vida, que puede superar los 100 años”.
como si fueran bosques
“Cuando mueren y sus cuerpos llegan al fondo del mar, este gas queda retenido en el lecho oceánico, reduciendo el stock de CO2 en la atmósfera, y contribuyendo como si fueran bosques, a la mitigación del cambio climático”, amplió.
Las ballenas son también grandes fertilizadoras de los océanos: al alimentarse de krill y defecar, van reponiendo nutrientes que permiten el crecimiento de algas y otros microorganismos que son a su vez alimento del krill, en un ciclo perfecto de economía circular.