Recientemente se dieron a conocer los resultados y conclusiones de un revelador estudio realizado por la profesora Nadine Unger de la Universidad de Exeter y el profesor Xu Yue del Instituto de Física Atmosférica de Beijin. La investigación mostró una realidad preocupante:
Más allá del lugar donde ocurren los incendios forestales, los contaminantes producidos pueden afectar el crecimiento de cultivos y plantas que se encuentren a cientos de kilómetros de la zona de impacto, provocando daños irreparables.
ALGUNAS CONCLUSIONES...
Tal como informa el portal Environmental News Network, Red de Noticias Ambientales en español, podemos saber que "el estudio examinó cómo el ozono y los aerosoles, dos contaminantes derivados de los incendios forestales, influyen en el crecimiento saludable de las plantas en áreas que aparentemente no se ven afectadas por los desastres naturales destructivos".
En el transcurso de la investigación se encontró que había una reducción significativa en la productividad de las plantas en áreas alejadas de las fronteras del incendio.
"El estudio sugiere que la contaminación por incendios podría representar una amenaza creciente para la productividad regional, e incluso global, en el calentamiento del mundo".Ampliando la información nos encontramos con los datos que aportan directamente los protagonistas desde la Universidad pública de Exeter, en el sur-oeste de Inglaterra.
El impacto del fuego
El estudio sobre el impacto de los incendios forestales (más allá de los límites donde se ocasiona determinado incendio) fue publicado el pasado 21 de diciembre en la revista científica Nature Communications con el título: La contaminación del aire por incendios reduce la productividad terrestre global.
El sitio exeter.ac.uk, da a conocer que el profesor Unger , del departamento de Matemáticas de la Universidad de Exeter , ha afirmado que "el impacto de estos incendios en la salud pública ha sido ampliamente reconocido, pero el impacto que ellos también tienen en nuestros ecosistemas es menos conocido".
Unger señala que encontraron que los contaminantes emitidos por estos incendios impactan a las plantas en áreas más allá de los límites del desastre.
"A nivel mundial, durante la última década, la contaminación por ozono provocada por el fuego redujo la productividad de la planta sustancialmente más que las pérdidas por sequía estimadas", sostiene.
Y el texto de la Universidad de Exeter es contundente: "El impacto del fuego en el presupuesto de carbono de la Tierra ha sido bien documentado. Cada año, los incendios globales emiten grandes cantidades de carbono directamente a la atmósfera. Esta pérdida inmediata de carbono se compensa parcialmente con un aumento en la productividad del nuevo ecosistema, impulsado por cambios en la composición del dosel y la respiración del suelo".
cómo se trabaja
Para el estudio, los científicos hicieron uso de modelos de computadora de última generación y una "amplia gama de conjuntos de datos de medición existentes", lo que les permitió evaluar los efectos separados y combinados de los contaminantes de incendios ocurridos entre 2002 y 2011.
Según exeter.ac.uk, que cita el trabajo de Nature Communications encontraron que "la Productividad Primaria Bruta (GPP), esencialmente la fotosíntesis de la planta, se redujo significativamente cuando la cantidad de ozono en la superficie aumenta. De manera crucial, esta reducción en el GPP no se limitó a las áreas que están inmediatamente dentro y alrededor de los incendios"... "Las áreas a sotavento de los incendios, a cientos de kilómetros de distancia, experimentaron una reducción significativa de la productividad de la planta".
Por otro lado, el profesor Unger explica: “En la medida en que estamos preocupados por la contaminación por partículas de fuego que afectan la salud respiratoria humana, debemos preocuparnos por la contaminación por ozono del fuego que perjudica a los bosques y la productividad agrícola a favor del viento".
En la actualidad se trabaja estudiando los incendios, pensando en el futuro más cálido que le espera a todo el planeta como consecuencia del calentamiento global. Los investigadores están usando el Modelo del Sistema de Tierra del Centro de Hadley Met Office del Reino Unido para predecir cómo el aumento de la actividad del fuego, la contaminación del aire y la sequía afectan la capacidad de la superficie terrestre para cultivar alimentos y absorber dióxido de carbono.
Noelia Gieser, equipo Sustentar