Playa de Crystal, y no es cuento de hadas
Foto: Sam Bee
La actividad humana deja huellas imborrables en nuestro planeta, el hombre acostumbra a tirar la basura como si wally fuera a venir a limpiar lo que se ensucia, .Muchas veces afeamos, destruimos paisajes naturales con nuestro desinterés y desidia por la naturaleza.
Aunque aveces si se deja de contaminar a tiempo y se deja que la naturaleza intervenga, puede darse un mágico paisaje natural.
Es el caso de la playa de cristal en California, Mendocino, en los EEUU, durante 18 años fue un basurero, entre 1949 y 1967, se arrojaban a ese vertedero, entre otras cosas, botellas de todos los colores.
Después del incesante trabajo de la naturaleza por restablecer el equilibrio, 40 años después, el cristal de las botellas erosionado por el agua y el mar, reflejan la luz del sol creando un paisaje artificial único.
La playa fue recientemente adquirida por el estado de California y es un espacio protegido. Con el objetivo de preservar la belleza artificial del lugar, no se permite a los visitantes llevarse consigo trozos de vidrio.
Para llegar a la playa hay que viajar hasta la localidad de Fort Bragg y una vez allí, dirigirse hacia el norte por la avenida principal hasta cruzarse con una calle que tiene el cinematográfico nombre de Elm Street. Tomando esta calle hacia el oeste llegaremos al destino. Una vez allí, podremos comprobar cómo la naturaleza es capaz de reparar el daño causado por el hombre, cuando este para a tiempo.
Foto: Sam Bee
Pero fíjense ustedes que un simple trozo de vidrio hace más de 40 años que está ahí y va a permanecer muchos más, ni hablar de los plásticos y otros residuos con los cuales la naturaleza, no puede lidiar.
Las acciones cotidianas son las más importantes. Cuidemos nuestro planeta, cuidémonos.
Redacción sustentar