Por unanimidad el Senado aprobó la ley de educación ambiental integral
Durante la madrugada de este
viernes y con 58 votos afirmativos, la cámara alta hizo ley la iniciativa que permite
que los estudiantes de todos los niveles adopten un enfoque integral sobre la
interdependencia de los elementos que interactúan en el ambiente.
LA ESTRATEGIA NACIONAL DE
EDUCACIÓN AMBIENTAL INTEGRAL
Los objetivos de la ley son
elaborar y diseñar políticas nacionales y orientar políticas jurisdiccionales,
estrategias y acciones de educación ambiental integral; alcanzar la más amplia
cobertura territorial, social y sectorial a nivel nacional y generar consensos
sociales sobre los cuales establecer acuerdos temáticos y prioridades.
Para eso se ha creado la
Estrategia Nacional de Educación Ambiental Integral (ENEAI) como el “principal
instrumento de la política de educación ambiental en todo el territorio
nacional”, además de las Estrategias Jurisdiccionales de Educación Ambiental
Integral (EJEAI).
La Estrategia Nacional se hará
operativa por medio de la articulación interministerial, interjurisdiccional e
intersectorial permanente, a través de la creación de una Coordinación
Ejecutiva de la Estrategia Nacional de Educación Ambiental (CENEA), que será a
la vez asistida por un Consejo Consultivo.
Todos los años durante el Día
Mundial del Ambiente cada jurisdicción deberá promover una acción comunitaria
en la que se fomente el “Compromiso Ambiental Intergeneracional” en el cual las
personas tengan la oportunidad de establecer un pacto de responsabilidad con el
ambiente y las generaciones sucesivas.
UNANIMIDAD
Tras la aprobación, el ministro de Educación, Nicolás Trotta, celebró la sanción: “Hoy el Senado argentino aprobó la Ley de Educación Ambiental Integral, clave para el ejercicio ciudadano del derecho a un ambiente sano y sostenible. Esta Ley refleja una lucha de años y recoge las demandas de los jóvenes en la construcción de un mundo más respetuoso”.
Por su parte, la presidenta de la Comisión de Ambiente del Senado, Gladys González, declaró: “Construir una Argentina sostenible requiere de un enorme cambio cultural, la forma más efectiva de lograrlo es a través de la educación. Espero que luego de la sanción de esta ley, el Poder Ejecutivo haga una convocatoria amplia y honesta donde no solo la academia, sino también el sector productivo y las organizaciones de la sociedad civil, especialmente los jóvenes, estén sentados en la misma mesa elaborando los contenidos y las estrategias”.
Máximo Mazzocco, fundador de
Eco House Global y miembro de Alianza por el Clima, sostuvo: “Estamos eufóricos
y muy entusiasmados. Faltan más leyes, pero la LEA es una de las primeras que
deberíamos haber sancionado después de la reforma constitucional de 1994. La
Educación para la Sostenibilidad es el puntapié inicial de la revolución
social, ambiental y económica que necesitamos. Los parches ciegos, sin visión,
ya no sirven. Vamos por un cambio estructural, masivo, que amerita un nuevo
contrato social”.
CLAVES DE LA LEY
El proyecto aprobado en el
Congreso propone entre sus puntos principales:
- Promover el desarrollo de la
Estrategia Nacional de Educación Ambiental (ENEA) y de las Estrategias
Jurisdiccionales de Educación Ambiental (EJEA), garantizando la creación y
existencia de un área específica para la educación ambiental dentro de las
respectivas carteras ambientales del Gobierno nacional, de las jurisdicciones
provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, compuestas por recursos
humanos y tecnológicos, y programas de trabajo y presupuesto, dependientes de
cada jurisdicción.
- Fortalecer las capacidades de
las carteras ambiental y de educación en la implementación de la estrategia, a
través de la profesionalización de los recursos humanos involucrados en la
tarea.
- Desarrollar estudios de
percepción de distintas regiones para ajustar la Estrategia Nacional de
Educación Ambiental y las correspondientes Estrategias Jurisdiccionales de
Educación Ambiental a la realidad de cada territorio.
- Crear un banco virtual
nacional de experiencias en educación ambiental.
- Generar y gestionar mecanismos
que faciliten el cumplimiento sistemático de la Agenda 2030 con sus Objetivos
de Desarrollo Sostenible, y aquellos que en el futuro se acuerden.
- Promover acciones comunitarias que fomenten el Compromiso Ambiental Intergeneracional.