Pinturas ecológicas caseras ¿te animas?
Pinturas y pigmentos naturales: Si has decidido cambiar de aspecto tu hogar, o dar algunos retoques de color a ciertas estancias o muebles, has de saber que existe una alternativa medioambiental a las pinturas tradicionales. Existe un amplio catálogo de materias primas renovables que nos permiten decorar nuestro hogar con la misma eficiencia que los pigmentos químicos. Las plantas y los minerales tienen el secreto de unas pinturas mucho más ‘limpias’ que resultan igualmente efectivas para las tareas del hogar.
Cada vez hay más gente que prefiere los eco-pinturas o pinturas ecológicas frente a las pinturas y barnices sintéticos.
¿Qué son las pinturas ecológicas?
Para que una pintura pueda ser considerada como ecológica sus componentes han de ser de origen natural (minerales y vegetales), de fuentes renovables y biodegradables. Para ello se utilizan minerales como el óxido de hierro o talco, así como aceites, resinas y tintas que provienen de raíces, hojas, cortezas y fibras de diversas plantas. Como disolvente se suele utilizar agua.
Evidentemente, las pinturas más ecológicas que existen son las naturales, es decir, las caseras, que siguen técnicas extraídas de la más pura tradición. Por poco dinero y unos cuantos ingredientes podemos elaborar nuestras propias pinturas ecológicas caseras ¿te animas?
- Pintura de patata
La pintura de patata o papa es muy económica y resistente. Puede utilizarse para muros, papeles, madera, o cualquier otra superficie porosa. Su receta es muy sencilla.
Ingredientes:
– 150 gramos de patatas
– Una tasa y media de agua hirviendo
– 150 gramos de tiza en polvo
– Un vaso de agua fría
– Pigmentos no tóxicos
Preparación:
1. Cuece 150 gramos de patatas, quítales la piel y haz un puré. Agrégale una taza y media de agua hirviendo, y luego mezcla bien.
2. Por separado, mezcla 150 gramos de tiza en polvo con un vaso de agua fría. Cuando espese, agrégale pigmentos vegetales o minerales no tóxicos.
3. Por último, mezcla bien todos los ingredientes. Puedes añadir, para hacerla más impermeable, una cucharadita de aceite.
- Pintura de aceite
Algunos aceites, como el de linaza, tienen muchas de las características de la pintura, como su textura, su cualidad de proteger la madera o ser impermeabilizantes. Pueden utilizarse mezclados con pigmentos vegetales o minerales no tóxicos que aporten color, y también solos, en reemplazo del barniz.
No necesita preparación, simplemente utiliza el aceite a modo de laca para la madera.
- Pintura de cal
La cal mezclada con agua forma una pintura blanca que ha sido utilizada por muchísimas civilizaciones para proteger sus muros, desinfectar y protegerse del calor.
En algunas regiones, que sufren de plagas de insectos que transmiten enfermedades, como la vinchuca (muy común en gran parte de américa latina), se recomienda a los habitantes pintar sus casas con cal para que estos insectos no puedan anidar, o en todo caso estén a la vista.
Ingredientes:
– Entre 2 y 4 litros de cal hidratada
– Un kilo de sal gruesa
– Cola vinílica o un engrudo casero
Preparación:
(Rinde por 10 litros)
1. Mezcla la cal hidratada con la sal gruesa. Utiliza más o menos cal y agua dependiendo de cómo quede la textura.
2. Añade algún fijador, que puede ser cola vinílica o una mezcla natural, por ejemplo leche en polvo con agua. Debes obtener una consistencia homogénea. Mientras la utilices, revuelve cada tanto para que la cal no se pegue al fondo.
- Pintura de leche
Esta pintura se realiza con cuajada de leche y es muy rendidora. Sirve para pintar muros de cemento o barro.
Ingredientes
– Dos tazas de leche
– Una cucharada de vinagre
– 150 gramos de tiza
– Un vaso de agua fría
– Pigmentos vegetales o minerales no tóxicos
Preparación
1. Para obtener la cuajada de leche, calienta dos tazas con una cucharada de vinagre, sin que hierva. Cuando cuaje, descarta el suero amarillento, y deja la crema reposar sobre una tela o filtro de café durante la noche. Obtendrás 100 gramos de una pasta con la consistencia del yogurt.
2. Por separado, mezcla 150 gramos de tiza en polvo con un vaso de agua fría, y cuando espese, agrégale pigmentos vegetales o minerales no tóxicos para darle color.
3. Por último, mezcla todos los ingredientes. Puedes añadir una cucharadita de aceite para darle un mejor acabado.
Tip general: cualquiera de las pinturas puedes prepararla en la cantidad que tu quieras, aumentando o disminuyendo las cantidades en la misma proporción. Por ejemplo, si duplicas el agua, duplica todos los otros ingredientes.