Fair Phone, un teléfono justo y ecológico
Un Smartphone que cuida el medioambiente desde su fabricación hasta el fin de su vida útil, una idea que comenzó como un sueño y en estos días va convertirse en realidad.
Hoy muchas empresas ya ponen en sus etiquetas de fabricación la huella de carbono o hacen saber a los ocnsumidores como bajan el impacto, pero esto va más allá.
El FairPhone promueve la concepción de comercio justo desde la extracción de los metales que forman parte del teléfono hasta la cadena final de comercialización.
Las características son interesantes ya que los usuarios pueden elegir su sistema operativo preferido. Las baterías son extraíbles y reemplazables, la Capacidad de SIM dual, un mínimo de embalaje, cargadores y accesorios no son incluidos por defecto, con el fin de reducir los residuos. Pero lo más interesante de este teléfono es que si la persona que lo posee tiene una mínima idea de electrónica puede hacerse cargo de la reparación ya que está fabricado para que todas sus partes se reemplazen fácilmente, Easi (er) para abrir y reparar.
El proyecto surgió hace 3 años como una campaña de Waag Society, la cual es un Media Lab donde diseñadores y creadores desarrollan tecnología creativa para innovación social.
Bas van Abel era el director creativo y cofundador de FabLab en Waag Society, después de «abrir el sistema» del smartphone y dandole luz a los problemas éticos que el sistema exacerba, se dio cuenta que en el momento no hay una alternativa. Con eso en mente, Bas decidió dejar su puesto como director creativo en Waag y fundar FairPhone como una compañía, nos cuenta Gabriel Sebastián, marketing del equipo.
Su camino los llevó hasta los lugares más alejados del mundo, como Congo para obtener tantalio y estaño y así asegurarse precio justo para quienes trabajan en esas minas comandadas por algún jefe militar. Luego el derrotero los llevó a China donde verificaron el impacto social que pueden tener con el primer FairPhone.
Sebastián nos cuenta entusiasmado ¨Nuestro sueño con FairPhone es darle visibilidad a la cadena de suministro de un teléfono móvil. Para ser responsables de nuestras cosas- nuestros «gadgets»- es necesario entenderlos desde dentro.
La razón la cual decidimos tornar este proyecto en una compañía que pone valores sociales sobre valores de lucro, es porque no nos vale simplemente creer que algo es imposible porque la mayoría lo dice.
FairPhone no es una solución para los problemas de las minas del Congo, o el medioambiente y trabajo en las fábricas de China. FairPhone es más que un teléfono, es el principio de un cambio sistémico.
Su conciencia de que producir un teléfono 100% limpio en su primera edición era imposible, no los amedrentó y siguieron en ese camino. A unos días de su lanzamiento al mercado el teléfono no es lo más justo a lo que aspiran, pero ya esta minuciosamente cuidado el proceso para que sea lo más acorde a los principios que lo inspiraron.
Afirma Bas van Abel Nuestro objetivo final es tener relaciones transparentes y de largo plazo con los proveedores para asegurar buenas condiciones laborales, la protección del medio ambiente y las prácticas de reciclaje seguras.
Nuestro manifiesto adoptado es «Si no se puede abrir, no lo posee.» Aquí hay algunas maneras que hemos aplicado el diseño inteligente, abierta a nuestro primer teléfono inteligente:
Una iniciativa que al menos merece ser difundida, que tiene nobles intenciones para cambiar los paradigmas de producción actual, ¿por qué no podemos ser justos con lo que hacemos para vivir?
Redacción Alejandra Gonçalves Mendes