Dieta mediterránea genera menor contaminacion
La dieta mediterránea es la que menor contaminación genera según un estudio que analizo la huella de carbono de diferentes dietas de diversos países como EEUU y Reino Unido comparando los diferentes menú con la dieta que se consume tradicionalmente en España.
Combatir el cambio climático es una prioridad internacional que debe ejecutarse en todos los ámbitos, como en el entorno familiar, teniendo en cuenta nuestra alimentación diaria, para el estudio se analizaron un total de 448 comidas y 448 cenas repartidas durante todas las estaciones del año para satisfacer unas necesidades calóricas medias de 2.000 kcal. Además que estos menús podrían haberse servido igualmente en cualquier colegio, restaurante o casa española. Las recetas analizadas de la dieta mediterránea incluyen algunos platos tan típicos como gazpacho andaluz, pisto manchego, paella o puchero.
La huella de carbono expresa la cantidad de dióxido de carbono equivalente causante del calentamiento global (se mide en kg de CO2 equivalente). Además del dióxido de carbono, diferentes gases contaminantes contribuyen al cambio climático, como el metano. Durante la investigación se confeccionó una base de datos con la huella de carbono de alimentos cultivados, pescados o producidos, y se calculó la huella de carbono de cada plato y menú simplemente multiplicando por la cantidad requerida en bruto para su preparación.
La huella de carbono media diaria obtenida fue de 5,08 kg de CO2 equivalente (CO2e), muy inferior a la media en EE UU, estimada entre 8,5 y 8,8 kg de CO2e, o la de Reino Unido, estimada en 7.4 kg de CO2e; todas ellas para la misma ingesta calórica. Además, se obtuvo la huella de carbono para otras 17 dietas terapéuticas como dieta blanda, líquida, hipoproteica o hiperproteica.
“Las diferencias entre el valor medio de la dieta mediterránea y la de los países como EEUU y Reino Unido se deben a que en España se consume mucha menos carne de vacuno (uno de los alimentos con mayor huella de carbono) y se toman más verduras y frutas, con baja huella de carbono”. Por eso, no solo es más sana, sino que la dieta mediterránea es más ecológica.